Los montacargas de combustión son equipos industriales diseñados para levantar y mover cargas pesadas. Su funcionamiento se basa en un motor de combustión interna, que puede ser de gasolina, gas LP o diésel, el cual proporciona la energía necesaria para realizar las tareas de elevación y transporte.
Ventajas de los montacargas de combustión:
- Mayor potencia: Son ideales para manejar cargas pesadas en diversas condiciones de trabajo.
- Autonomía: No requieren tiempos de carga prolongados, lo que permite un funcionamiento continuo.
- Versatilidad: Pueden utilizarse tanto en interiores como en exteriores, y en terrenos irregulares.
- Durabilidad: Diseñados para resistir condiciones exigentes y un uso intensivo.
¿Cuándo utilizar un montacargas de combustión?
- Trabajos pesados: En industrias que requieren mover cargas de gran tonelaje.
- Operaciones continuas: Cuando se necesita un equipo que funcione sin interrupciones.
- Exteriores: Para trabajos en almacenes exteriores, patios de carga y construcción.
- Terrenos irregulares: En superficies no planas o con pendientes.
Desventajas a considerar:
- Emisiones: Generan gases de escape que pueden contaminar el ambiente.
- Ruido: Son más ruidosos que los montacargas eléctricos.
- Mantenimiento: Requieren un mantenimiento más frecuente que los eléctricos.